Gustavo Petro negó que su administración intercepte comunicaciones de magistrados colombianos

Gustavo Petro negó que su administración intercepte comunicaciones de magistrados colombianos

El presidente colombiano, Gustavo Petro, pronuncia un discurso. (Foto de Raúl ARBOLEDA / AFP)

 

 

El presidente de Colombia, Gustavo Petro, insistió este martes en que su Gobierno no ha “interceptado a nadie de manera ilegal” tras las recientes denuncias de varias cortes de la justicia colombiana de presuntas interceptaciones y seguimientos ilegales a magistrados, que achacó a “fake news” de los medios de comunicación.





“Le llegan rumores a la prensa y los vuelven noticia. Les llegan WhatsApp a los magistrados y se creen la red de WhatsApp. Se cree en el ‘fake news’. Están intentando debilitar al Gobierno rompiendo sus relaciones internas y sus relaciones con las otras ramas del poder público, con ‘fake news'”, dijo Petro en una ceremonia de ascensos de la Policía.

Magistrados de la Corte Constitucional denunciaron ante la Fiscalía la presunta interceptación de sus teléfonos, una denuncia a la que también se sumó este martes la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP).

“Todos los cuerpos de inteligencia dicen: aquí no se ha interferido a nadie de manera ilegal. Entonces, ¿de dónde sale esa noticia?”, cuestionó el mandatario colombiano este martes.

La información propició la apertura de una investigación por parte de la Fiscalía sobre este posible espionaje, algo que también hizo la Presidencia colombiana, que anunció una “investigación interna”.

Petro ya desmintió el lunes el espionaje asegurando que “desde el primer día de Gobierno la orden del presidente a los organismos de inteligencia es no usarla contra la oposición, prensa o cortes”.

Además, los presidentes de cuatro de los altos tribunales de Colombia rechazaron el lunes las posibles escuchas a magistrados mediante la interceptación de sus teléfonos.

El posible espionaje al Poder Judicial ya sucedió en el pasado, durante la presidencia de Álvaro Uribe (2002-2010), lo que derivó en un escándalo con condenas a algunos de los responsables.

EFE