La policía nipona investiga a ciudadano chino que vandalizó polémico santuario de Tokio

La policía nipona investiga a ciudadano chino que vandalizó polémico santuario de Tokio

 

La policía de Japón investiga a un ciudadano chino que el pasado fin de semana vandalizó un pilar de piedra ubicado en el controvertido santuario Yasukuni de Tokio, que conmemora a caídos nipones en conflictos bélicos y vinculado al imperialismo japonés.





El vándalo grabó en las redes sociales un vídeo en el que muestra su trayecto en metro hasta el lugar y cómo, una vez allí, simula que orina en el monumento y pinta en él la palabra ‘toilet’ (inodoro, en español) con un ‘spray’ de color rojo que saca de uno de los bolsillos de su pantalón.

Según recogen este lunes medios locales, el hombre, que se hace llamar “Cabeza de Hierro”, publicó las imágenes en una aplicación china para compartir vídeos y recibió elogios de otros usuarios que tildaban sus acciones de “bien hechas” y “hermosas”.

Un cirujano plástico nipón, muy conocido en el país por su trayectoria profesional y posturas políticas nacionalistas, ha ofrecido, a través de X, una recompensa de diez millones de yenes (unos 58.555 euros o 63.600 dólares) para quien capture al hombre.

“¿No hay nada que podamos hacer respecto a la liberación de agua contaminada al océano por parte del gobierno japonés?”, pronuncia el vándalo en las imágenes, en lo que se entiende como una protesta por el vertido al Pacífico de agua tratada de la accidentada planta nuclear Fukushima Daiichi.

Un ciudadano vio el ‘grafitti’ alrededor de las 6:20 hora local del sábado (21:20 GMT del viernes) y avisó a la policía, que está examinando las imágenes de las cámaras de vigilancia del área cercana al pilar para intentar identificar al perpetrador.

El incidente llega semanas después de que otro ciudadano, también chino, volara un dron en instalaciones militares japonesas y compartiera en redes sociales imágenes en las que aparece el destructor JS Izumo, buque insignia de su clase, lo que derivó en que el ministro de Defensa nipón, Minoru Kihara, se pronunciase al respecto y calificara la acción de “extremadamente grave”. EFE