Gente condenó la invasión de Rusia a Ucrania

Gente condenó la invasión de Rusia a Ucrania

La gente mira un edificio residencial dañado en la calle Koshytsa, un suburbio de la capital ucraniana, Kiev, donde supuestamente cayó un proyectil militar, el 25 de febrero de 2022. – Las fuerzas invasoras rusas presionaron profundamente en Ucrania mientras las batallas mortales llegaban a las afueras de Kiev, con Se escucharon explosiones en la capital el viernes temprano que el gobierno asediado describió como “horribles ataques con cohetes”. (Foto de GENYA SAVILOV / AFP)

 

 

 





Desde la Mesa Ejecutiva Nacional de GENERACIÓN INDEPENDIENTE (GENTE) deseamos expresar nuestro más enérgico rechazo a la invasión ejecutada por Rusia sobre la república de Ucrania a partir de ayer, 24 de febrero. Es un inexcusable ataque militar llevado a cabo por fuerzas pretorianas rusas, en contra de un Estado soberano de la comunidad internacional.

La invasión militar del territorio ucraniano, ordenada de manera aviesa por el presidente ruso Vladimir Putin, constituye per se una flagrante y muy grave violación de los pilares normativos del derecho internacional que hacen posible la convivencia pacífica de los Estados en el concierto de las naciones.

Pero no se trata solo de la trasgresión de acendrados y bien conocidos principios de aceptación universal como los de soberanía, independencia e integridad territoriales; de no injerencia en los asuntos internos de otros Estados; de autodeterminación de los pueblos; o de prohibición del uso o la amenaza del uso de la fuerza como mecanismo de resolución de conflictos entre Estados.

La guerra en Ucrania es, además, un artero ataque contra los avances de la democracia, la libertad, la civilidad, la seguridad y el desarrollo humano que lentamente, pero con determinación, el mundo ha venido forjando para beneficio de todos luego de haber sufrido las más grandes atrocidades y el dolor desgarrador que normalmente se incuban desde los escenarios de guerra.
El mundo libre, civilizado y democrático hoy reacciona de manera unánime para condenar el injustificable inicio de estas hostilidades que han generado -en pocas horas- la inestimable pérdida de cientos de vidas humanas inocentes, así como una considerable pérdida material.

Solo quienes simpatizan con regímenes tiránicos y violadores del derecho ajeno pueden aceptar o apoyar la consumación de este tipo de acción externa que raya en lo delictivo.

En este contexto, desde GENTE nos unimos sin ambages a las manifestaciones mundiales de rechazo a la guerra y de condena a la violación del orden jurídico internacional.

La Federación de Rusia, que en diversas ocasiones ha demostrado desprecio por la legalidad internacional invadiendo y anexando territorios extranjeros, debe saber que su reiterada actitud, agresiva y belicista, tarde o temprano le hará pagar el precio reservado a quienes nada ni a nadie respetan; el precio que debe pagar cualquier Estado forajido.
Frente a la atrocidad de la guerra impulsada unilateralmente por un Gobierno desbocado, los organismos multilaterales deben también reaccionar firmemente para ofrecer sólidas respuestas de protección a naciones vulnerables. A la sanción moral de los ciudadanos del mundo se deben sumar ahora las sanciones multilaterales pre-concebidas para estos casos. Esa es su razón de ser. No es hora de apaciguamientos ni blandenguerías.

Recordamos y advertimos, finalmente, a quienes circunstancialmente ejercen de forma ilegítima y de facto el poder político en Venezuela, que nuestro país, bajo ninguna circunstancia, debe avalar o de algún modo apoyar estos graves hechos que constituyen indudablemente una abierta violación del derecho internacional y que son merecedores de repudio mundial.

Al contrario, Venezuela tiene el imperativo de rechazar estas graves y por demás peligrosas violaciones de normas que son fundamentales para la convivencia pacífica internacional. Sería imperdonable que desde la ilegitimidad interna nuestro país proceda ahora a convalidar una ilegalidad internacional que vuelve a colocar al mundo al borde de una catástrofe bélica de grandes proporciones.

Nos solidarizamos con el pueblo de Ucrania. ¡No están solos! Su lucha también es nuestra, contra la tiranía y contra el nuevo orden geopolítico mundial que algunos pretenden imponer por la fuerza.