Nicolás Maduro escaló este viernes 1 de octubre en sus acostumbrados insultos contra el presidente encargado de Venezuela, Juan Guaidó, con el objetivo de culpar al Gobierno Interino por la debacle económica de todo el país.
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“Esa empresa fue secuestrada”, dijo Maduro en referencia a Monómeros, filial de Pequiven instalada en Colombia. “Secuestrada por la banda de Guaidó”, insistió.
Según el vocero chavista, cuando Monómeros estaba en sus manos, “nosostros la teníamos en el nivel máximo de producción” e invertía “por lo menos la mitad de producción en viviendas”.
“Nos robaron y nos secuestraron Monómeros. Y ahí está quebrada, la quebraron y ahora se echan la culpa unos con otros”, agregó Maduro.
En cuanto a la filial de Pdvsa en Estados Unidos, Citgo, Maduro optó por una postura similar. Acusó a la antigua administración del expresidente Donald Trump y a Guaidó de supuestamente “quebrar” dicha empresa.
“Se robaron Citgo, han quebrado Citgo, y le van a quitar Citgo a Venezuela”, vociferó mientras confundía los tiempos verbales de sus acusaciones sin fundamento. “Por eso Venezuela entera tiene que reaccionar con indignación y repudiar a esta banda de delincuentes”, culminó.
Recientemente, Tareck El Aissami, funcionario del chavismo, acusó sin pruebas a Guaidó de desviar fondos de la Fundación Simón Bolívar asdcrita a Citgo, ante lo cual dicha institución salió al paso para negar tal hipótesis.