Glass Marcano es una joven oriunda de Yaracuy, que a sus 24 años de edad, su vida, cambió completamente en solo unos días. Su historia se hace impresionante al ver como deja de atender una frutería familiar a dirigir la Orquesta Filarmónica de París, una de las más importantes del mundo.
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Los grandes músicos dicen que Marcano explotará la música clásica, demuestra pasión y hace que muchos recordemos al gran Gustavo Dudamel.
Marcano cuenta que para inscribirse en la competencia, en la que solamente participan mujeres, debió emprender una campaña para recolectar los 150 euros de la inscripción, más el boleto a París.
Logró llegar a Francia a través de un vuelo humanitario cuyo destino era Madrid, España. Nunca había salido del país y tampoco había viajado en avión y, confiesa, estuvo prácticamente dos días sin dormir antes de enfrentar la primera ronda eliminatoria.
Fue proclamada por el jurado y el público en La Maestra, un concurso internacional destinado a reparar una desigualdad estructural: según datos disponibles, solamente el 4,3 % de los directores de orquesta en el mundo son mujeres, explica Emmanuel Hondré, director de conciertos de la Filarmónica de París.
Muchos miembros del jurado se ofrecieron a potenciar e impulsar su ingenio para que pueda cosechar más éxitos en su carrera musical.