WeWork: un unicornio que no despegó

 

Se suponía que WeWork sería uno de los unicornios estrellas que se lanzaban al mercado público en el año 2019 y finalmente tuvo que retirar su oferta accionaria y terminó reorganizándose.





Por Laszlo Beke

Su CEO fundador salió en Septiembre 2019 y uno nuevo, veterano del sector de Bienes Raíces y experto en rescates acaba de ser nombrado para que realicé una recuperación de la empresa. WeWork había planteado que su oferta era de “espacio-como-un servicio” y que tecnología era el fundamento de su plataforma global y la diferenciaba. Definitivamente la pretensión que WeWork debía ser considerada como empresa de tecnología no funcionó, así que es interesante identificar las lecciones que pueda brindar el fracaso acaecido y cómo se puede recuperar WeWork.

Espacio como un servicio

El concepto de “espacio-como-un servicio” no convierte automáticamente al que lo aplica en una empresa de software. Ese era uno de los argumentos más fuertes que WeWork utilizó para tratar de justificar una valoración de US$47.000 millones, hoy en día alrededor de US$10.000 millones. Eso hacía que su valoración fuera en varios múltiplos mayor que la de su principal competidor (IWG), el cual alquila más espacio y además produce utilidades. Su argumento era qué como empresa de tecnología, su innovación y flexibilidad la hacía mucho mejor que una empresa de bienes raíces y que por ello sus costos por empleado eran casi 60% menores que los de sus competidores.

Empresa de Tecnología

WeWork plantea que la “tecnología es el fundamento de su plataforma global” y que el propósito de su tecnología y su experticia operacional les ha permitido escalar rápidamente su oferta de “espacio como un servicio”, mientras se mejora la calidad de sus soluciones y disminuyen los costos de encontrar, construir, llenar y operar los espacios. WeWork contrata muchos trabajadores del área de tecnología, con un total de 1.000 ingenieros, diseñadores de productos y científicos de aprendizaje de máquina dentro de los 12.500 empleados directos. Sin embargo, hoy en día bajo ese consideración la mayoría de las corporaciones también serían empresas de tecnología.

Espacio de oficina y privacidad

Las oficinas abiertas se supone que son un aliciente para la colaboración – liberación de las barreras, donde se encuentran comprimidos como sardinas, las personas hablarían más y aparecerían más ideas brillantes. Sin embargo, hay otros estudios que indican que las oficinas abiertas promueven más el aislamiento que la innovación, la pérdida de privacidad y la percepción de estar siendo observado hace que muchos en este tipo de oficinas terminen colocándose auriculares y hablando menos.

El nuevo CEO de WeWork

Para Sandeep Mathrani, este probablemente será el reto mayor de una persona que se ha especializado en asumir situaciones aparentemente imposibles. Ha logrado recuperaciones a través de transformaciones en una categoría que se consideraba insalvable – en los centros comerciales (mall) suburbanos y lo hizo trabajando en Vornado, donde el foco era espacio de oficina y se trataba de entender como Internet impactaría en las propiedades de oficinas en Nueva York y otras grandes ciudades.

Uno de sus grandes rescates, fue el Bergen Mall en Paramus Nueva Jersey, el cual a pesar de estar ubicado en una de las zonas más pudientes no lograba despegar. Mathrani logró convertirlo en el Bergen Town Center consiguiendo una lista impresionante de nuevos arrendatarios. Su acción más osada – y la que tuvo el mayor impacto en atraer clientes al mall – fue captar una tienda de 77.000 pies de Whole Foods. En 2005 colocar un supermercado en un mall suburbano cerrado era considerado algo radical. La estrategia fue crear un mall que pudiera ser muchas cosas para diferentes tipos de compradores, incluyendo un nuevo Target, una tienda de descuentos y restaurantes vanguardistas. Repitió otro rescate algo similar con General Growth Properties, el segundo propietario más importante de centros comerciales en Estados Unidos.

El reto en WeWork

Los retos en WeWork posiblemente sean similares a los de los centros comerciales. Allí se hablaba de la creación de un ambiente de un modelo “vivir, trabajar y comprar”, cuando la nueva realidad indica que nadie necesita ir a los centros comerciales, ya que se puede comprar desde la casa. WeWork debe encontrar la forma de alquilar espacio de oficina y ganar dinero simultáneamente en un mundo donde hay mayor número de personas trabajando desde casa y donde se requiere menos espacio de oficina, La respuesta de WeWork podrían ser asociaciones de espacios de oficina, de detal y residenciales. Mathrani pudiera tratar de crear un modelo “vivir, trabajar y comprar” bastante diferente al enfoque actual de WeWork.


Se utiliza información proveniente de “New WeWork CEO Sandeep Mathrani Saved A Dying Mall. Can He Do The Same For The Coworking Company?”  http://bit.ly/36ZVp7o, “How WeWork is trying to justify its tech company valuation” http://bit.ly/2TzPn8n y  “Open Offices Are a Capitalist Dead End”   https://nyti.ms/2nmrFQX.  También aparece en mi blog http://bit.ly/31EqMTT