El nuevo coronavirus ya mató más que el Sars en China continental

El nuevo coronavirus ya mató más que el Sars en China continental

Foto: REUTERS / Thomas Peter, 28/01/2020, Hunan (China).

 

Con 361 muertos en China continental, el balance del nuevo coronavirus supera ahora el del síndrome respiratorio agudo grave (Sars, por sus siglas en inglés) y el gobierno chino, que admite “insuficiencias” en su reacción, reconoció el lunes que necesita urgentemente mascarillas de protección para enfrentar la epidemia.

“Lo que China necesita de urgencia son máscaras, trajes y gafas de protección”, declaró la portavoz adjunta del ministerio de Asuntos Exteriores, Hua Chunying.





Varios países, entre ellos Francia, Reino Unido, Japón y Corea del Sur, ya enviaron material médico a China, agregó la portavoz.

Entretanto el país ha estado paralizado por el temor al virus que ha contaminado ya a más de 17.000 personas, y el ministerio de la Industria reconoció este lunes que, tras concluir el domingo las largas vacaciones del Nuevo Año Lunar, las plantas retoman su producción y funcionan a un 70% de su capacidad.

Frente al sistema hospitalario desbordado, Wuhan recibió el lunes a los primeros enfermos en un nuevo hospital construido en diez días, indicó el Diario del pueblo.

Desde el 24 de enero, China se apasionó por la construcción de este hospital, y las cámaras de televisión filmaban casi de manera continua a miles de obreros, así como las excavadoras y las grúas que trabajaban en la obra.

Otro hospital más grande (1.600 camas) está en construcción y debería abrir sus puertas en unos días.

Entretanto el país ha estado paralizado por el temor al virus que ha contaminado ya a más de 17.000 personas, y el ministerio de la Industria reconoció este lunes que, tras concluir el domingo las largas vacaciones del Nuevo Año Lunar, las plantas retoman su producción y funcionan a un 70% de su capacidad.

Récord

Las autoridades sanitarias chinas reportaron 57 decesos en las últimas 24 horas, en el peor saldo diario desde que el nuevo coronavirus fue detectado en diciembre en Wuhan, la capital de la provincia de Hubei.

Hay ahora en China continental (sin contar a Hong Kong y Macao) más muertos que los 349 que le provocó la epidemia de Síndrome Respiratorio Agudo Severo (SRAS) en 2002-2003.

El SRAS, que contagió a unas 5.300 personas en varios países, dejó un balance total de 774 muertos, en su mayoría en Hong Kong.

La Organización Mundial de la Salud (OMS), que ya declaró emergencia internacional por la actual epidemia, reportó en Filipinas la primera víctima mortal del nuevo coronavirus fuera de China, un hombre de 44 años de Wuhan.

Estigma

La mayoría de las muertes y contagios se concentran en Hubei, donde unos 56 millones de habitantes están aislados del mundo desde el 23 de enero, y tienen severas restricciones para salir de sus viviendas, en una tentativa de contener la propagación.

Sus habitantes se sienten discriminados y bajo constante sospecha.

Lucy Huang, una directora de documentales de 26 años que vive en Pekín y nació en Wuhan, se dice “muy herida”. “Nuestro enemigo es el virus, no debería ser la población de Hubei o Wuhan”, dijo a la AFP.

En la enorme ciudad industrial oriental de Wenzhou, a unos 800 km de Wuhan, puesta en una gigantesca cuarentena, sus nueve millones de habitantes recibieron la orden de que solo un residente por hogar puede salir cada dos días para comprar artículos de primera necesidad.

En Hong Kong, donde hay confirmados 15 casos, cientos de empleados de los hospitales públicos se pusieron en huelga este lunes para reclamar el cierre de la frontera con China continental, con el fin de reducir el riesgo de propagación.

Impacto económico

El coronavirus también tiene un impacto económico cada vez más fuerte, por el cierre de negocios en China, la suspensión de viajes internacionales y el impacto en las cadenas de producción.

Los mercados bursátiles en Shanghái y Shenzhen cayeron estrepitosamente un 8% cuando los inversores regresaron de las vacaciones extendidas por el Año Nuevo Lunar.

Más medidas

Varios países han multiplicado las medidas de protección y repatriado a sus ciudadanos desde China.

Estados Unidos, Australia, Nueva Zelanda, Israel, Guatemala y El Salvador, entre otros, prohibieron la visita de extranjeros si han estado en China recientemente, y también han advertido a sus propios ciudadanos de evitar viajes a territorio chino.

China criticó duramente el lunes a Estados Unidos por haber iniciado las restricciones y acusó a Washington de “crear y sembrar el pánico”. “No nos ha dado por ahora ninguna ayuda sustancial”, dijo la portavoz de la cancillería.

Rusia anunció este lunes que expulsará a los extranjeros contagiados con el nuevo coronavirus mientras Mongolia, Rusia y Nepal han cerrado sus fronteras terrestres.

Los países del G7 -Canadá, Francia, Alemania, Italia, Japón, Reino Unido y Estados Unidos- ya tienen casos de contagio. Los siete países discutirán una respuesta conjunta.

El gobierno británico además anunció que aportará ayuda financiera para el desarrollo de una vacuna.

A seis meses de los juegos Olímpicos de Tokio, la agencia antidopaje china decidió suspender “momentáneamente” sus actividades de control “preocupándose por la protección de la salud” a causa de la epidemia.

AFP