La fallida venganza por 25 mil dólares de la gente del Chapo Guzmán contra su ahijado

Gente cercana a Guzmán Loera habría ordenado un ataque en contra de uno de sus ahijados. Foto: AP.

 

El 20 de agosto, Dámaso López Serrano “El Mini Lic”, ahijado de Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera, fue trasladado de una prisión en Nueva York a una cárcel federal en Oklahoma después de haberse hecho público que meses atrás había recibido amenazas de muerte por declarar en un juicio contra Jesús Raúl Beltrán León, uno de los miembros del Cártel de Sinaloa.

Por Infobae





Esta mes surgió nueva información sobre cómo se realizaría la venganza en contra del “Mini Lic”, hijo de Dámaso López Núñez “El Licenciado”, también preso en Estados Unidos y quien en el pasado fuera uno de los principales aliados de Guzmán Loera, actualmente sentenciado a cadena perpetua.

El canal local de ABC News en Chicago señaló que de acuerdo con documentos de la Corte, López Serrano, aunque no fue presentado ante el jurado, fue identificado como el testigo “Cooperante 1” y debido a su testimonio iba a ser objeto de una venganza por parte del gente del Cártel de Sinaloa en una cárcel de Illinois y la consigna era “partirle la cabeza” para lo cual se había ofrecido un pago de USD 25 mil.

Dámaso López Serrano, “El mini Lic”, se entregó de manera voluntaria al gobierno de Estados Unidos. Foto: Cortesía.

 

El ataque se había planeado en abril pasado y aunque no se concretó, se consideró que al hacerse pública la colaboración de López Serrano, quien se espera que también testifique en próximos juicios contra otros narcotraficantes mexicanos, su vida estaba nuevamente en peligro.

“Una de las razones por las que los funcionarios del Departamento de Justicia han estado tan preocupados por el continuo bienestar de “Mini Lic” es porque hay juicios próximos en los que podría ser llamado a declarar, ya que admitió haber participado en más de una docena de asesinatos y 20 secuestros relacionados con el tema de la venta de drogas”, señala el reporte de ABC.

El juez Rubén Castillo condenó el mes pasado a Beltrán León a 28 años de prisión. Castillo dijo en la sentencia que se trataba de uno de los aliados más confiables de “El Chapo” y que fue “afortunado de que los fiscales no demostraran que usted ordenó a los miembros de una pandilla atacar a un testigo clave del gobierno de los Estados Unidos, porque si ese hubiera sido el caso, solo el hecho habría merecido una sentencia mínima de 35 años “.

Dámaso López Núñez fue testigo en el juicio contra Guzmán Loera. Foto: EFE.

 

Los registros de la Oficina de Prisiones de los Estados Unidos revelan que López Serrano se encuentra ahora en el Centro Federal de Transferencias en la ciudad de Oklahoma. La instalación es un centro de seguridad administrativa para prisioneros que requieren protección especial. La mayoría de los reos permanecen en las instalaciones solo por un corto tiempo antes de que se les pueda asignar una prisión permanente. Esta cárcel tiene un aeropuerto adjunto y una vía segura de avión utilizada para el traslado de reos, y es la sede de la llamada “Con Air” de la Oficina de Prisiones, que se hizo famosa en una película de Hollywood del mismo nombre.

“Los Dámasos”, como se le llamaba a la fracción del Cártel de Sinaloa encabezada por López Núñez y su hijo se enemistó con la parte encabezada por los hijos de Guzmán Loera y por Ismael “El Mayo” Zambada, lo que llevó a los primeros a aliarse con el rival Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).

“El Mini Lic” era el encargado de la plaza de Baja California Sur que cuenta con importantes destinos turísticos como Los Cabos y La Paz, territorio que no estaba dispuesto a ceder a los hijos del Chapo, quienes buscaban adueñarse de la plaza.

Iván y Jesús Alfredo Guzmán tuvieron una serie de diferencias con el “Mini Lic”. Foto: Cortesía.

 

En una serie de enfrentamientos con los hijos de Guzmán Loera, el grupo de ‘El Mini Lic’ habría bajas considerables durante los primeros meses de 2017, para salvar su vida, a López Serrano sólo le quedaba entregarse a Estados Unidos y colaborar con la DEA para obtener una pena reducida.

En enero de 2018 delató a más de 125 integrantes de la organización criminal al declararse este miércoles culpable de narcotráfico ante un juez federal en California. Habría llegado a un acuerdo con la Fiscalía Federal en San Diego luego de que el 27 de julio de 2017 se entregara a las autoridades estadounidenses.

Ese día cruzó la frontera de Mexicali, en Baja California, a Calexico y solicitó entrevistarse con representantes de la DEA.