La eliminación de la bestia, por Rafael Acevedo y Hugo Faría

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Desde hace más de 5 años hemos venido insistiendo que la narco tiranía jamás saldrá por la buenas sin antes llevarse por delante a una cantidad de inocentes, mucho más que una Guerra declarada puede llevarse. Hace 10 meses escribimos un artículo titulado “La Ayuda Militar Internacional es la mejor Ayuda Humanitaria”, muchos se opusieron, alegaban que la cantidad de muertos iba a ser enorme, hoy por hoy preguntamos, ¿cuántos inocentes se hubieran salvado si nos hubieran escuchado?

Por Rafael Acevedo y Hugo Faría





Entendemos que la solicitud de ayuda militar no es un proceso sencillo y expedito. Sin embargo, si nunca pides la pizza, jamás el delivery va a llegar. Hoy, 10 meses después de nuestro artículo, las cosas están más alineadas para la solicitud oficial. Sin embargo, ¿existirá la disposición política para ello? o el temor de los políticos es la pérdida del poder, la formación de un Gobierno de transición, colegiado sería lo ideal, con acompañamiento de las fuerzas de seguridad internacionales mientras se restablece el orden y se crean nuevas instituciones confiables, con apoyo y realización de juicios en cortes internacionales mientras se depura el corrompido sistema judicial, con las verdaderas reformas de Mercado libre que se requieren para que las personas comiencen a reactivar la economía, la eliminación de una constitución inservible, que lo único que hace es darle todo el poder al gobierno para seguir pisoteando las libertades de los Venezolanos, etc…; nosotros creemos que su negativa radica en esto.

Nuestro propósito no es inculpar al Presidente Interino Juan Guaidó, pero es dejar claro que quiéralo o no, él es el responsable principal desde el 10 de enero del resguardo de la seguridad de los venezolanos. Sabemos que muchos en este momento comenzarán a alegar una y otra cosa en contra de nuestra posición, sin embargo, recuerden que él tiene el reconocimiento de más de 60 países a nivel internacional, el respaldo de la sociedad venezolana, y la atención de los medios de comunicación. Por tanto, no es desespero como muchos tratan de hacer entender, es simplemente que debe actuar. No es hora para las dudas, para tratar de quedar bien con sus camaradas de la MUD, el ya no es un político que le debe su trabajo a una bancada de determinado partido, él debe entender que es el Presidente y él es quien decide.

Después del blackout más largo de la historia reciente de Venezuela, que asesinó a inocentes por falta de la energía necesaria para atenderlos, la tasa de suicidio en aumento por la depresión y angustia, la escasez de alimentos ahora acentuada por haberse dañado lo que las personas y comercios tenían en su inventario, no queda otra cosa que eliminar la bestia que ha ocasionado la crisis en Venezuela, el socialismo. Esa eliminación solo será posible por medio de la ayuda militar internacional la cual, repetimos, será la mejor ayuda humanitaria para Venezuela. Insistimos que la única vía para asegurarnos que Venezuela entre al camino de la prosperidad sostenible y a largo plazo es que se elimine esa bestia, lamentablemente si se deja que las cosas pasen al ritmo y planificación de los políticos tradicionales y economistas planificadores centrales, Venezuela seguirá teniendo la raíz -la bestia- viva.

Muchos preguntan que nosotros siendo libertarios y liberales clásicos, promotores de soluciones de mercados, cómo podemos ir en contra de nuestros principios de no agresión, no intervención, y respeto a la autodeterminación, acá los explicaremos. Tal como lo dice el Dr. Tom Palmer en su libro “Why Liberty” hay un límite para estos principios, y en Venezuela desde hace mucho se sobrepasaron.

Los que creemos en la libertad profesamos la no agresión, pero cuando nos están amenazando o perjudicando es cuando debemos hacer uso del derecho, y obligación, a la autodefensa, el problema está es que cuando tu confrontación es totalmente asimétrica, como en el caso de los venezolanos, tienes que pedir ayuda. En estos momentos si cuerpos de seguridad internacional llegan a Venezuela jamás sería entendido por los venezolanos, al menos por la mayoría, como una invasión, para nosotros esto representaría la mejor ayuda y la vía más segura para la eliminación de la bestia. Quienes alegan sobre la autodeterminación deben entender que los venezolanos no han elegido lo que se tiene, eso ha sido corruptamente impuesto, las elecciones del 20 de mayo de 2018 son totalmente fraudulentas, si analizan la abstención significa que los venezolanos no queríamos a ninguno de los socialistas ni siquiera a los colaboracionistas que intentaron validar el último proceso presentando sus candidaturas.

Por otro lado, los países que ayuden a Venezuela realizarían una acción humanitaria pero también profiláctica, ya que, se elimina la posibilidad de la continua exportación del socialismo a sus países. Podrían eliminar el riesgo de seguridad nacional, ¿se imaginan a los terroristas islámicos dueños del Thorium –más de 20% de las reservas del mundo- y Uranio en Venezuela, los extremistas rusos, chinos, todos ellos a una pequeña distancia con la Florida -apenas 3hrs de vuelo comercial-?  Así pues, estamos totalmente en contra de lo que Paul Craig Roberts escribió, ya que la preocupación de los Estados Unidos no es tener acceso al petróleo venezolano, de por sí más del 70% de las ventas son a este país, ni a otros recursos naturales, sino resguardar que quienes se estén metiendo dentro de la guarida de los chavistas no sean sus enemigos declarados, y lamentablemente sí que los son.

El mundo y los venezolanos deberían entender que hay momentos en los cuales se deben tomar decisiones, que, aunque parezcan extremas, son las correctas. Indiscutiblemente la ayuda militar internacional es una de ellas, de lo contrario día tras día seguirán siendo asesinados miles de venezolanos por la bestia que aún vive y que los políticos seguirán alimentando y no la eliminarán. Recordemos que Santo Tomás de Aquino dijo “La eliminación física de la bestia es bien vista por Dios si con ella se libera a un pueblo”.