Un asesino en serie a quien le gustaba romperle las piernas a las jóvenes antes de violarlas y asesinarlas confesó nueve ataques similares, dicen las autoridades indias.
Por Chris Dyer / Daily Mail
El sospechoso, nombrado en los medios de comunicación indios como ‘Sunil’, fue arrestado por la brutal violación y asesinato de una niña de tres años, pero mientras estaba siendo interrogado admitió una serie de ataques sexuales violentos similares.
A raíz de una gran persecución, fue arrestado en la aldea de Magarpur, Uttar Pradesh, ayer, luego de que el niño muriera a unas 320 millas de distancia en Gurugram, una ciudad al suroeste de Nueva Delhi el 12 de noviembre.
Se dijo que la niña de 20 años supuestamente atacaba a niñas pequeñas, generalmente en barrios marginales, antes de someterlas a ataques violentos.
Dijo que la policía andaba alrededor de los puestos de comida conocidos como ‘bhandaras’ (cocinas comunitarias que ofrecen comida gratis durante festivales religiosos) donde atraía a sus víctimas con dulces y chocolates.
Se dice que Sunil, que se decía que vagaba de un lugar a otro y dormía donde podía, también le dijo a la policía que romperle la pierna a la niña con un ladrillo antes de violarla era un “ritual que lo despertó”.
Sus restos fueron encontrados el día después de que fue reportada como desaparecida a solo 300 yardas de donde fue llevada, con el cráneo fracturado después de que le golpearan en la cabeza con un ladrillo.
Los médicos forenses dicen que ella murió por “la lesión en la cabeza y el sangrado interno excesivo”.
Según el Times of India , Sunil podría ser uno de los peores asesinos pedófilos en serie “conocidos por los organismos de aplicación de la ley indios”.
La policía dice que Sunil supuestamente violó y asesinó a al menos nueve niñas preadolescentes en Delhi, Gurugram, Gwalior y Jhansi durante un período de dos años.
La primera de sus víctimas conocidas fue un niño de cuatro años que, según se dice, secuestró en 2016 antes de que otra niña fuera encontrada en enero del año pasado con lesiones en la cabeza y las piernas.
El oficial de investigación Sumit Kuhar, dijo que llevaría a sus presuntas víctimas a áreas abandonadas y que no podría ser localizado porque no tenía un teléfono móvil o un lugar fijo para vivir o trabajar.
Añadió: “Nos dijo que todo lo que quería era una comida sabrosa en bhandaras y chicas jóvenes para satisfacer su lujuria.
‘Nos sorprenden sus confesiones ya que no solo violó y mató a tres niñas en Gurugaram, sino a cuatro en Delhi, una en Jhansi y otra en Gwalior en los últimos dos años.
‘Recuerda las violaciones, conectándolas a los bhandaras a los que había ido. Se enfocaba en los niños que venían a buscar ‘prasad’ o comida gratis y estaban solos.
‘Escogió niños que estaban solos y lejos de sus hogares. Los llevaría a lugares desolados e incluso arrojaría los cuerpos en áreas desoladas. No tenía un lugar fijo para comer o dormir, ningún lugar fijo de trabajo y no llevaba un teléfono móvil “.
Con traducción del Daily Mail.