Gervis Medina: El darwinismo social en Venezuela

Gervis Medina: El darwinismo social en Venezuela

Gervis Medina @gervisdmedina

 

Es una teoría social que sostiene aplicaciones sociales en instituciones humanas, basado en la idea de la supervivencia del más apto, por lo que, concibe como un mecanismo de evolución social y la creencia del concepto darwiniano. Puede ser usado para el manejo de la sociedad humana, insistiendo en la competición por bienes y servicios o diversos puestos sociales.

Haciendo una conexión entre esta teoría y el axioma de “Thomas Hobbes” con su obra nos arroja como resultado, que nos hemos convertido en seres solitarios, pobres, malévolos, brutos, idiotas, criminales y con una vida corta. Cada año que pasa se incrementan los índices de criminalidad en nuestra sociedad, sentenciando una suerte de lo que denominamos “Bellum omnium contra omnes” (“Guerra de todos contra todos”) y “Homo homini lupus est” (“El hombre es un lobo para el hombre”).





En criollito se traduce, el especulador, el político ladrón, el corrupto, el asesino, el envidioso, el estafador, el infiel, el mal gobernante, el mal padre o madre, el ciudadano que inobserva las normas, como lo más básico que detenerse a la señal del Pare o una Luz roja de tránsito; hemos llegado a ser caníbales de los bienes y servicios, como por ejemplo que el billete de diez mil, debas pagarlo a 4x o 5x su valor. Por cierto, para el mes de diciembre estarían pagando hasta 10x su valor, con una inflación superior al millón por ciento y un dólar negro que llegará a más de 20 millones de bolívares.

Estamos viviendo un momento complejo, caracterizado por una serie de situaciones que implican pérdida de capacidad para los venezolanos en acceso a derechos básicos, como alimentación, medicinas, dinero en efectivo; con una hiperinflación incontrolable, desatada con el parámetro de un dólar paralelo; interpretada desde el exterior como la quiebra de Venezuela, se afirma que estamos en default, y que todo es responsabilidad del Gobierno, y del Socialismo; que volveremos a estar bien cuando el Gobierno de Nicolás Maduro caiga y se implemente una economía de mercado.

El problema surge cuando estas fuentes de placer hay que compartirlas con otras personas o interfieren con sus deseos. Ello determina que estemos en continua guerra con los demás. Esta situación en la que vive el venezolano en su estado natural actuando según los impulsos que recibe, por lo que intentará a toda costa evitar los impulsos que le resulten desagradables y conseguir todos los agradables posibles.

Puedo enumerar tres motivos básicos por los cuales hay conflictos en el venezolano: el primero es la competición, que hace que el hombre invada para obtener algo; el segundo, la desconfianza, para la seguridad; y el tercero, la gloria, para la reputación, llámese Líder, gobierno, oposición. Por lo que, el Estado se dedica a maquillar cifras y estadísticas de forma inexacta e incierta, y prometiendo cosas que no va a cumplir. Además creando tipos penales que no existían como el “ajustes de cuentas” como una suerte del que al cero pago, y aun no le atina a la solución real del problema.

Un Estado fallido o fracasado se caracteriza porque pierde el monopolio del derecho a sancionar, a satisfacer las necesidades de sus administrados; perdiendo fuerza y soberanía territorial, y que además permite a estos dominadores, que en su debilidad comparta con grupos armados político-militares delictivos, para hacerse de bienes y servicios y colocar el precio que mejor les parezca. Vean este dato que es interesante, existen 17.794 militares en función pública, en todas las administraciones de bienes y servicios se encuentran ellos dominando el escenario, más no resguardarlos.

Más de 2.100 generales activos existen en el país el 90% de ellos sin comando. Éste gobierno populista, deletéreo e imbécil, se ha encargado de acomodarlos para que no traicionen al régimen, a la revolución puesto a que, está en peligro por la guerra económica.

Si no se detiene la tendencia de esta conducta criminógena, será el final de la vida civilizada: secuestros, narcotráfico, asesinatos, enfrentamientos de pandillas, hasta llegar a guerras civiles y secesión. Así peligró Colombia muchos años con las FARC y el ELN y es la situación similar en nuestro país, todos contra todos.

Es en los barrios populares, donde la carencia de papel higiénico, pasta dentífrica, alimentos, champú, jabón de baño y lavar ropa, están ausentes en más un 82%. Las personas en sus casas y oficinas, utilizan el papel reciclado oficio o carta, para limpiarse “el rabo” y cuando pueden traerse servilletas de los baños de restaurantes y centros comerciales. Ahora todo es reusable, ante la carencia de estos recursos de aseo y limpieza. Al agua de jabón de lavar ropa, luego de usado lo almacenan para lavarse el cuerpo y los “corotos”

¡Con los dientes amarillos! mal aliento y todos despeinados, como el video de “Thriller” se encuentran las personas, lavándose con agua oxigenada y jabón de panela. Ni hablar del tema de desodorantes y perfumes. Las personas han tenido que ingeniársela remendando ropas y calzados, limpiando “la pecueca” que dejan los pies, pantaletas e interiores y los famosos chores. Una suerte de “zombies” está creándose en la ciudad, en el país, en el barrio, la oficina y pare usted de contar.

Y por supuesto, el liderazgo político del gobierno y la oposición venezolana, convocan al pueblo a soportar las penurias, pero ellos, estos destructores de la economía venezolana, andan como reyes, en sendas camionetas de $50.000 y nunca pasan hambre; esos mismo con escoltas y choferes, ahora son los reyes y promotores del darwinismo social en Venezuela.

Gervis Medina
Abogado-Criminólogo