Julio César Arreaza: Enemigo de la juventud

Julio César Arreaza: Enemigo de la juventud

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Escribir comporta para mí un compromiso de dejar testimonio de nuestro tiempo y contribuir con los hallazgos encontrados a agregar valor a la Historia Contemporánea.

El régimen fallido con 19 años en el poder es enemigo de la juventud que hoy plena las calle de Venezuela desde el 1 de abril, luchando por la restitución del hilo constitucional roto y del voto libre, universal, directo y secreto, mecanismo- democrático- para dirimir la espantosa crisis, afirmando el principio de la altenabilidad eliminado. Qué desgracia para la Robolución no contar con juventud, éste su talón de Aquiles, le asegura su inevitable extinción política.

Calificamos al régimen como una organización criminal revestida de ideología, falso discurso de camuflaje, para traficar con la buena fe de los incautos, a quienes tienen chantajeados con quitarles los claps de comida si no votan a juro por la constituyente espuria.

La impronta de un fraude montado de manera torpe en la era digital y global, lanzará rápidamente al régimen al basurero de la historia. Patético ver a los bandidos que representan a los poderes públicos, hoy vaciados de contenido, blandir la espada de Bolívar, premiados por ser reos, por ahora, de una sanción externa. Es una corte de los miagros exhibiendo al desgaire su lenguaje patibulario y  caras de pobres diablos.

Resulta una tragedia para la izquierda mundial que un grupete impresentable de difuntos galácticos, maisantos, nestorinos, zamoranos, evos, zelayas, samperes, herederos narco ladrones, hayan desprestigiado al extremo a esta ideología.

La justicia hoy no existe y descansa en una jurisdicción militar arbitraria, grosera y cuestionada, y tiene en su cúspide de la pirámide al moreno maikel. Oh contradicción, los ilegales castigan a los legales, no es eso ver a los magistrados constitucionales presos por los magistrados express espurios.

Profundamente reaccionario es el narco régimen, pura fuerza bruta, y en su condición de asesino se ha cargado 112 vidas de compatriotas, un charco de sangre juvenil, que su pecado ha sido el de manifestar pacíficamente contra este horror. El régimen carece de juventud y por eso no tiene futuro, en su transcurso le ha robado el porvenir a la generación emergente.

Los efectivos militares y policiales, en comandita con colectivos- criminales- armados- afectos al gobierno, obran coordinadamente atropellando al pueblo que manifiesta su descontento y su rechazo a la espuria y patética asamblea constituyente.

La elite de los 40 forajidos nació para robar en contubernio con el narcotráfico. El régimen terminó convertido tristemente en un antro de represión, y como perla de la situación actual, aquí se roba hasta a los muertos, una profanación fue llevarse 190 placas de bronce del cementerio. El bien ganará la partida al mal, con la ayuda de Dios.

¡No más prisioneros políticos, torturados ni exiliados!