Cada día que pasa, es más evidente el fracaso que ha tenido un régimen que por más de 17 años han destruido nuestro país. Lamentablemente, en estos momentos, en vez de vivir estamos sobreviviendo.
Un pequeño ejemplo de las situaciones recurrentes de las que hemos sido víctima los venezolanos, es el caso de una compañera de trabajo, donde su nieta de 9 meses sufrió un colapso respiratorio. Debido a esto, se vieron en la necesidad de salir de emergencia a un hospital donde por falta de oxígeno no pudo ser atendida. Posteriormente, recorrió más de 4 hospitales, donde al menos un par de ellos estaban cerrados por falta de personal en las emergencias. Como última opción tuvo que terminar pidiendo prestado recursos a familiares y amigos para que la niña pudiera ser atendida en una clínica privada. Si esta venezolana, no hubiera podido solucionar su problema, es muy probable que este caso se sumara a la larga lista de niños y adultos que fallecen por falta de insumo en los hospitales.
No podemos aceptar que hechos como estos sigan ocurriendo diariamente en Venezuela, necesitamos un cambio urgente de gobierno.
Hoy, En medio de la peor crisis humanitaria que estamos viviendo todos los venezolanos, Leopoldo López, cumple 1000 días de estar injustamente preso en la Cárcel de Ramo Verde. Han sido 1000 días de aislamiento, de torturas físicas y psicológicas, de aguantar maltratos a su familia y a sus seres queridos. Aun resistiendo de la cara más oscura de la dictadura de Nicolás Maduro, las convicciones de Leopoldo López jamás han sido quebrantadas. Podrá estar preso y aislado, pero sus ideales están más vivos que nunca.
Leopoldo, nos demostró que la libertad de un país no se negocia, que no se aceptan cheques en blanco, que no se le da el brazo a torcer a un régimen corrupto y fracasado como el que lidera Nicolás Maduro. Un gobierno que cada día que pasa es el responsable del hambre, de la inseguridad y muertos a diarios en nuestro país.
Se cumplen 1000 días de querer encerrar al hombre que se atrevió alzar su voz y hablar claro al país. Es por eso que hoy cobardemente lo ponen tras las rejas, y es tanto el temor que le tienen; Que aun estando encerrado, lo mantienen aislado para que no hable con nadie.
Es por esto, que luego de haber conocido los “resultados” de la segunda reunión de la Mesa de Diálogo entre el régimen y un sector de la oposición, se demuestra nuevamente que la salida de este gobierno nacional es principalmente en la calle, no se puede dialogar con quien busca mantener a un país entre el hambre, la miseria y corrupción.
¡Venezuela no aguanta más! Debemos salir a las calle de manera pacífica y organizada a exigir el respeto y cumplimiento de nuestra constitución. Es momento de luchar por una causa justa, por la defensa de la soberanía nacional; hagamos valer la Voluntad Popular de los venezolanos.
¡La paz no se negocia, se conquista!
Luis Somaza
Concejal de Baruta
Voluntad Popular