Lo interesante del ejercicio, es que cuando la pareja pasa al frente del grupo cada uno debe decir las respuestas que anoto o memorizó de su compañero, tal como si fuese él o ella misma en primera persona, sin ver a su otro compañero de quien está hablando, y sin consultarle alguna de las respuestas. Por su parte, los presentes deben mirar a la persona de la que se está hablando, no al interlocutor.
Esto tiene varios objetivos pero uno de los principales es que los presentes aprendan a separar los canales de comunicación, es decir, el auditivo del visual, y que por otro lado el interlocutor hable de la otra persona también, de esta manera está asumiendo la posición de ella, y el que escucha que están hablando de él debe también aceptar que el interlocutor hable de la manera que crea conveniente de su persona.
Este ejercicio enseña a ponernos en los zapatos del otro y también a entender que los demás hablarán de nosotros en la forma que ellos quieran hacerlo, y si entendemos esto, nos ayudaría a evitar innumerables conflictos que se presentan diariamente en nuestra vida como por ejemplo las discusiones entre amigos y compañeros de trabajos, pues se dan debido a que no entendemos que definitivamente debemos aceptar que los otros nos perciben de forma distinta y opuesta a lo que nosotros somos.
También, nos da la posibilidad de acercarnos a sentir de la manera como se siente la otra persona cuando nos colocamos en sus zapatos.
Si frecuentemente hacemos este ejercicio de colocarnos en los zapatos del otro, nos ayudaría a evitar o solucionar cuantiosos conflictos pues podríamos llegar a entender la forma de pensar, los sentimientos y el punto de vista de las personas que tenemos a nuestro alrededor, y así poder razonar quizás en las posiciones que estos asumen en determinada ocasión, e incluso pudiéramos sorprendernos porque tal vez llegáramos a tomar posiciones que jamás pensaríamos llegar a asumir.
Por eso te invitamos, siempre que tengas una diferencia con alguien, ponerte en sus zapatos y luego negociar, porque tendrás elementos que te ayudarán a alcanzar una negociación más justa, para ti y para el otro.
Escrito por: Abog. Elizabeth Castillo Medina. Directora de Mediación de Conflicto Redes por la Vida A.C
Dr. Leonardo Prieto. Certificado N.1 en Venezuela en nivel 1 y 2 de Filosofía Kingiana de la Universidad de Rhode Island y Vicepresidente Redes por la Vida A.C