Propietarios de vehículos se encuentran en una fuerte disyuntiva. La desaparición de tres importantes marcas de lubricantes para vehículo en el país, ha cerrado el compás de oferta, dejando al conductor con dos opciones: adquirir el aceite nacional o comprar el importado, cuyo costo es hasta 12 veces más alto. El Impulso
Tras el cierre de importantes empresas de lubricantes, por problemas con las divisas, sólo quedan en el mercado marcas nacionales como PDV, de Petróleos de Venezuela. Sin embargo, desde finales del año pasado este aceite sólo es llevado a las estaciones de servicio. Su valor es muy bajo pero no se halla.
Así lo refieren comerciantes como José Luis Rodriguez y los mismos ciudadanos, quienes se han visto obligados a adquirir marcas, poco confiables, para no maltratar el motor por falta de mantenimiento oportuno.
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