“Mayday, mayday, desperfecto en un motor”, dijo piloto antes que el avión cayera al río

“Mayday, mayday, desperfecto en un motor”, dijo piloto antes que el avión cayera al río

(Foto AP)
(Foto AP)

 

Momentos antes de que el vuelo 235 de TransAsia Airways se inclinara pronunciadamente y cayese a un río, uno de sus pilotos dijo “mayday, mayday, desperfecto en un motor”, según dijo el jueves un funcionario de aviación, que rechazó comentar la posible causa del accidente.

Un “desperfecto en un motor” hace referencia a llamas que se extinguen en la cámara de combustión del motor, de forma que se apaga y deja de propulsar la hélice. Las causas de este fallo podrían incluir una falta de combustible u obstrucción por ceniza volcánica, un pájaro y otro objeto. “Mayday” es una llamada de emergencia internacional.





Al menos 32 pasajeros del avión de turbohélices ATR 72 fallecieron y 15 sobrevivientes resultaron heridos en el accidente ocurrido en la capital taiwanesa, el último de una serie de accidentes protagonizados por aerolíneas asiáticas. Los buzos seguían rastreando el río para dar con los 11 desaparecidos, entre los que están los dos pilotos. Las cajas negras de la aeronave fueron recuperadas durante la noche.

Imágenes de video sobre los últimos momentos del avión en el aire tomadas el miércoles por cámaras en automóviles no parecen mostrar ninguna llama mientras el aparato se inclinaba pronunciadamente, con las alas casi en posición vertical, golpeando el puente de una carretera antes de caer al río Keelung.

Una grabación de audio de las comunicaciones entre el piloto y la torre de control durante el despegue y el breve vuelo, de apenas unos minutos de duración, fue ampliamente emitida. Un funcionario de la Administración de Aeronáutica Civil de Taiwán que se negó a dar su nombre confirmó el jueves el aviso de emergencia a bordo (mayday), pero no dijo cómo podría relacionarse con la causa del choque.

Entre los heridos estaba Huang Jin-sun, un pasajero de 72 años que dijo que intentó ayudar a otros viajeros que pasaban apuros en río.

“Vi a otros que se ahogaban”, dijo a la cadena ETTV desde su cama en el hospital general Tri Service de Taipei. “Si no me movía lo suficientemente rápido como para ayudarles, pronto estarían muertos”.

Sospechó que el vuelo tenía problemas desde el principio.

“Sentí que algo no estaba bien después de que el avión despegó”, dijo. “Le dije a las mujeres sentadas a mi lado que se abrochasen el cinturón, se agarrasen al asiento y cubriesen la cabeza. Justo acabé de decirlo y el avión se cayó”.

Unos 10 buzos del departamento de bomberos de Taipei estaban buscando más cuerpos que podrían estar en el fondo del frío río. Con ayuda de una grúa, el miércoles por la noche se remolcó la parte posterior del avión hasta la orilla. El fuselaje del jet, que en su mayoría fue desmantelado por herramientas hidráulicas de los rescatistas, fue colocado en la orilla del río junto al equipaje recuperado.

A mediodía del jueves, alrededor de una docena de familiares de víctimas taiwanesas se acercó a la zona para celebrar ritos funerarios tradicionales. Acompañados por monjes budistas hicieron sonar campanas de mano, se inclinaron hacia el río y sostuvieron inscripciones realizadas en pedazos de tela atados a piezas de bambú que se supone que guiarán a los espíritus de los muertos al descanso.

Familiares de algunos de los 31 pasajeros de nacionalidad China llegarán a Taipei la tarde del jueves en un vuelo fletado.

El presidente de Taiwán, Ma Ying-jeou, visitó el jueves los hospitales de la capital para seguir la recuperación de los heridos y pasó por la morgue para consolar a los familiares que examinaban los cuerpos de las víctimas, dijo su oficina.

“Este tipo de incidente de seguridad aérea no solo rompe a un sinnúmero de familias felices pero también afecta al turismo de viajeros de fuera de Taiwán”, dijo la oficina de Ma en un comunicado sobre la visitas, en referencia los 31 pasajeros procedentes de la China continental. “Debemos superar esta amarga experiencia y realizar mejoras completas”.

El buzo de la policía Cheng Ying-chih dijo que las operaciones de búsqueda y rescate estaban viéndose obstaculizadas por la “visibilidad cero ” en el turbio río y las bajas temperaturas del agua, que obligaban a los rescatistas a trabajar en turnos de una hora.

La parte delantera del avión se había partido en numerosos trozos, lo que dificultaba los trabajos, añadió.

“Estamos frente a unos trabajos de búsqueda y rescate muy duros”, dijo Cheng a periodistas congregados en la orilla al lado de las ordenadas filas de restos y maletas.

La destrozada parte trasera de la aeronave quedó tendida boca abajo, sin las alas ni la cola — que se separaron —, y con múltiples agujeros en un lado.

Las acciones de los pilotos en los últimos momentos del vuelo han llevado a especular que intentaron evitar edificios de gran altura siguiendo la línea del río y luego giraron bruscamente para caer en el agua en lugar de en tierra. La autoridad de aviación de Taiwán dijo que no tenía pruebas de eso.

El alcalde de Taipei, Ko Wen-je, calificó al piloto Liao Chien-tsung de héroe por haber evitado estrellar el avión contra edificios o importantes infraestructuras.

Tanto la agencia como la aerolínea TransAsia Airways, con sede en Taipei, declinaron especular sobre los motivos que provocaron el accidente el avión cerca del aeropuerto del centro de la ciudad alrededor de las 10:55 a.m. del miércoles.

Otro ATR 72 operado por la misma aerolínea se estrelló el 23 de julio al término de un tifón en las remotas islas de Penghu —controladas por Taiwán_, con un saldo de 48 muertos; el accidente aún están siendo investigado.

ATR, un consorcio franco-italiano con sede en Toulouse, Francia, dijo que estaba enviando un equipo a Taiwán para colaborar con la investigación.

El avión ATR 72-600 que chocó el miércoles es el mejor modelo del fabricante, y el piloto tenía una experiencia de 4.900 horas de vuelo, dijo Lin Chih-ming, de la Administración de Aeronáutica Civil.

El avión tiene una reputación de seguridad y fiabilidad generalmente buena y es conocido entre las aerolíneas por ser barato y eficiente, dijo en Singapur Greg Waldron, editor general para Asia de la revista Flightglobal.
Por RALPH JENNINGS, Associated Press