Leopoldo Fontana: Triste historia

Leopoldo Fontana: Triste historia

thumbnailleopoldofontanaYo llegue a Francia en 1958 a empezar mis estudios en el Instituto Francés de Ciencias Políticas de la Universidad de Paris.
Uno de mis compañeros era nieto del marqués de “L’Aigle” (El Águila). Y como yo siempre he tenido mucha empatía con la gente mayor, con el tiempo, me hice más amigo de su abuelo que de mi propio compañero.

Entre los dos cataclismos de la 1ª y la 2ª guerras mundiales, apenas transcurrieron 20 años, y en 1958, en plena post-guerra de la segunda, todavía estaban vivos los que habían peleado en la primera, entre ellos, el viejo marqués de L’Aigle que me contaba lo siguiente.

“Antes de la guerra de 1914, la moneda corriente en Francia era el oro, y yo prefería los billetes a las pesadas morocotas que me abrían huecos en los bolsillos. Pero después de la guerra, todo cambió, y el franco se devaluó, con la consiguiente inflación. Luego vino la Segunda Guerra Mundial que casi lo liquida.”





Cuando yo llegué en agosto 1958, había control de cambio, y los francos se contaban por miles, hasta que el general De Gaulle, Presidente de la República, decidió revaluarlo al “nuevo franco” que valía 100 de los “viejos”. Al término de la guerra hubo racionamiento hasta que el aparato productivo se recuperó. Después, se podía conseguir de todo.

Escuchando al viejo marqués de “L’Aigle”, yo me decía: ¡gracias a Dios que soy venezolano! Tenemos una moneda muy fuerte, cuyas monedas son de plata. Un país muy rico, poco poblado para su superficie. Y no ha habido dos guerras. ¡Por lo tanto, eso nunca nos va a pasar a nosotros!

Y ahora, cuando tengo su misma edad, estoy viviendo lo que él me contaba. ¡Un bolívar que no vale nada! Una inflación de más del 63%, “por ahora”. Una escasez de alimentos y medicinas que ocasionan trifulcas cada vez que llega un producto de primera necesidad, o un medicamento irremplazable.

Y esto, sin dos guerras mundiales. ¡Pero la herencia del “gigante eterno”! Continuada con su sucesor escogido por los Castro. ¡E incapaz de remediar la situación!

leofontanab@hotmail.com