El National Sleep Foundation (NSF) señala que el lugar donde dormimos es vital para obtener un descanso adecuado, ya que algunas distracciones pueden alterar nuestro sueño y generar cansancio. Salud180
Para que tu recámara sea el templo de descanso que tanto necesitas, sólo tienes que seguir los siguientes pasos y mentalizarte para disfrutar de este ambiente.
1. Cuida la temperatura. Una habitación fresca favorece un mejor descanso y sueño. La clave es que identifiques tu temperatura corporal y la combines con el resto de la habitación. Una buena recomendación son los 20 grados centígrados.
2. Iluminación. Apaga las luces en tu habitación una hora antes de que te vayas a dormir. Esto ayudará a que tu cerebro asimile que es momento de descansar. Utiliza cortinas gruesas que mantengan oscura tu habitación y te permitan dormir bien.
3. Pintura. Tu recámara debe ser un templo de descanso, así que elige colores neutros que te encanten y que te generen paz y armonía.
4. Ropa de cama. Elige sábanas, colchas y almohadas que sean cómodas y que no afecten tu calidad del sueño. Recuerda que tu colchón debe ser cómodo para que te despiertes con la sensación de descanso y no adolorido.
5. Reduce al máximo los ruidos. Mientras duermes, tu cerebro sigue registrando sonidos en un nivel muy básico, lo cual puede despertarte en cualquier momento o dañar tu calidad de sueño. Trata de evitar cualquier aparato electrónico dentro de tu recámara y cierra las ventanas y puertas de tu habitación para aislarla del ruido.
6. Rodéate de las esencias de tu agrado. El olfato juega un papel importante para descansar profundamente, así que utilízalo a tu favor al usar esencias que favorezcan tu descanso como la lavanda. Rocía con esta esencia tu almohada o sábana y prepárate para descansar.