Por magia del régimen, los venezolanos perdimos desde hace quince años un medio a través del cual, y pese a la alternabilidad de gobiernos en el poder, se pudo mantener un nivel de equilibrio informativo muy cercano al modelo comunicacional ideal; en cambio, ganamos desde hace algún tiempo -para la causa de la gran mayoría de quienes aspiramos expresarnos con libertad- un canal al que hoy día nos apegamos y abrazamos, como es CNN.
Ya no nos importa que los voceros del régimen mantengan el estribillo de un VTV como “canal de todos los venezolanos”; sabemos que lo perdimos, desde que comenzamos a perder la democracia conquistada a partir de enero del 58.
Las luces del gran canal que constituyó para los venezolanos VTV, se apagaron apenas la dirigencia del MVR, primero, y PSUV, después, tomaron por asalto las cámaras y micrófonos de la estación, para divulgar desde Los Ruices hacia toda Venezuela, los venenos encapsulados en malas palabras y gestos lanzados a través de las hondas televisivas, por funestos personajes como un tal Mario Silva, un Alberto Nolia y, ahora, el actual, capitán Diosdado Cabello.
Momentáneamente se encendieron otras luces que nos permitieron, por algunos años, enterarnos y conformar nuestras propias ideas sobre la realidad del país, a través de una televisión que llegó a ceder importantes espacios para la denuncia y la protesta. Pero no tardaron en llegar las ordenes que, impartidas desde muy alto, comenzaron a trazar lineamientos manipuladores envueltos en cortinas ideologizantes, las cuales permitieron el cierre de un canal televisivo que, por su gran penetración en las clases populares, se constituía en eficaz medio de confrontación frente a los contenidos propagandísticos impuestos por quienes se han adueñado del poder.
Así, se consumó la expropiación con características delictivas, de Radio Caracas Televisión, y posteriormente el traspaso de señales radiofónicas de toda una red de emisoras a los nacientes círculos y colectivos cuyos operadores, sin la debida preparación exigida por las leyes del país (entre otras la Ley de Ejercicio del Periodismo y de otras normativas sobre comunicación) se apoderaron de los micrófonos, para divulgar su ideología de la manera soez y antiética como la realizan.
Hoy, el espectro radiofónico y televisivo apenas subsiste, bajo manipulaciones que han permitido neutralizar la expresión auténtica de los venezolanos; mientras otros importantes medios de comunicación colectivos, como los impresos, se ven obligados a la reducción de espacios en periódicos, revistas y libros, a causa de presiones y restricciones para la importación de los insumos requeridos por la industria.
Hoy, nuestras voces e imágenes han perdido sustancialmente espacios en los medios de comunicación del país, para enterarnos de lo que ocurre en nuestra grande y heroica patria, en gran contraste con los que el régimen ha abierto para la profusión de su propaganda a través de toda una cadena de medios a través de los que trata de engañar a los venezolanos y al mundo sobre nuestra verdadera situación.
Sin embargo, frente a todos los obstáculos y barreras impuestas por los actuales dueños del poder político en Venezuela, contamos afortunadamente con una ventana, la cual permite al mundo y a nosotros mismos, conocer las noticias que nos ocultan nuestros propios medios. Y esa es la ventana que, en la actualidad, nos permite CNN, por lo que podríamos asegurar que, si realizáramos una encuesta en todo el ámbito nacional, estamos seguro quearrojaría como resultado que, en estos momentos, CNN está constituido en el auténtico canal de todos los venezolanos que aspiramos vivir en libertad, el que seguimos noche a noche para enterarnos de lo que aquí, muy lamentablemente, está ocurriendo.
Juan Jose Moreno A.
Twitter: JJMorenoA