Detienen a 30 Damas de Blanco en Cuba

Detienen a 30 Damas de Blanco en Cuba

(Foto EFE)

Oficiales de seguridad en Cuba detuvieron a casi 30 integrantes del grupo disidente Las Damas de Blanco al tiempo que una multitud apoyada por el gobierno golpeó y pateó dos veces a uno de los principales líderes de oposición en lo que fuera un acto más de represión contra los activistas defensores de la democracia, publica El Nuevo Herald.

Juan O. Tamayo
jtamayo@elnuevoherald.com

Guillermo Fariñas, uno de los disidentes más conocidos del país, dijo que sufrió cerca de media docena lesiones durante los ataques del domingo, cuando trató en dos ocasiones de llegar a la estación de policía de su pueblo natal Santa Clara para registrar una queja contra el arresto de las 11 Damas de Blanco.





Fariñas dijo que una turba de aproximadamente 120 o 130 personas organizada por el gobierno, bloqueó la calle y cerca de 40 personas le propinaron patadas. Después de la primera golpiza, Fariñas fue a su casa a cambiarse la ropa ensangrentada, pero cuando regresó fue atacado de nuevo en frente de la estación.

Los oficiales de la policía lo llevaron hasta el hospital local donde fue tratado por una cortada en la cabeza, y luego le prometieron que podría regresar a la estación de policía para poner la queja, dijo Fariñas al Nuevo Herald en una conversación telefónica desde Santa Clara.

La queja que logró finalmente registrar en su tercer intento, alega que las Damas de Blanco fueron apresadas ilegalmente en Santa Clara cuando caminaban a solas o en pareja hacia la misa del domingo en la iglesia de la Divina Pastora, ya que la ley cubana solo prohíbe la reunión de grupos no autorizados de tres o más personas, afirmó Fariñas

Fariñas, ganador en el 2010 del Premio Sájarov para la Libertad de la Conciencia del Parlamento Europeo, dijo que reconoció a algunas de las personas que lo golpearon, y que eran entrenadores deportivos y enfermeras que están en espera de los lucrativos trabajos en el exterior que asigna el gobierno.

El reportaje completo en El Nuevo Herald