Revelan que el cerebro de Einstein era inusual

Revelan que el cerebro de Einstein era inusual

Un estudio reciente corrobora y amplía lo que ya se sospechó hace más de medio siglo: que el cerebro de Albert Einstein no era físicamente como los de la mayoría de la gente.

Contexto.com.ar





Se ha verificado que algunas partes del cerebro de Einstein eran diferentes a las de la mayoría de las personas, y es muy probable que esas diferencias estuvieran asociadas a las extraordinarias capacidades cognitivas del genio, según se desprende de los resultados del nuevo estudio dirigido por la antropóloga evolutiva Dean Falk, de la Universidad Estatal de Florida en Estados Unidos.

Falk, y sus colegas Frederick E. Lepore de la Escuela Médica Robert Wood Johnson, adscrita a la Universidad de Medicina y Odontología en New Jersey, y Adrianne Noe, directora del Museo Nacional estadounidense de Salud y Medicina en Silver Spring, Maryland, han descrito por primera vez la corteza cerebral completa del cerebro de Einstein a partir de un examen de 14 fotografías descubiertas recientemente.

Los investigadores compararon el cerebro de Einstein con 85 cerebros humanos “normales” y, a la luz de estudios actuales basados en escaneos cerebrales hechos con tecnología moderna, han deducido las consecuencias cognitivas de sus inusuales características.

Aunque el tamaño total y la forma asimétrica del cerebro de Einstein eran normales, las cortezas prefrontal, somatosensorial, motora primaria, parietal, temporal y occipital fueron, en palabras de Falk, “extraordinarias”. Éstas pudieron proporcionarle a Einstein las bases neurológicas de algunas de sus habilidades matemáticas y visuoespaciales, por ejemplo.

Después de que Einstein muriera en 1955, su cerebro fue extraído y fotografiado desde múltiples ángulos. Además, se dividió en 240 porciones, a partir de las cuales fueron preparadas muestras histológicas.

Lamentablemente, la gran mayoría de las fotografías, porciones y muestras han estado fuera del alcance público durante más de 55 años. Las 14 fotografías utilizadas por los autores del nuevo estudio están ahora en manos del citado museo de salud y medicina.